Estrés, depresión, y ansiedad. Ninguno de estos sentimientos nos parecen desconocidos. A todos nos ha tocado alguna vez vivir un momento estresante o triste, y es parte de la vida. Por esto, cada vez más personas se orientan en la búsqueda de la paz interior, frente a estas situaciones.
Pero la anhelada paz interior no es simplemente algo que puedas obtener como si nada. No es algo que pueda decidir hacer y luego hacerlo.
Alcanzar la paz en la mente y el cuerpo, y lograr la felicidad, tampoco es imposible, solo lleva tiempo.Para ello hay que llenarse de pensamientos positivos, practicar la meditación y darse cuenta de que no hay nada en este mundo que no podamos lograr.
Es por ello que la paz interior es un estado que se debe lograr y mejorar, un viaje que requiere un compromiso de por vida y que se puede lograr gracias a varias técnicas que discutiremos en el artículo del día de hoy.
A continuación, analizaremos los fundamentos detrás de la paz interior: sus connotaciones espirituales y mentales, sus aplicaciones prácticas en la vida cotidiana y cómo puedes incorporar la paz interior en tu forma de vivir.
¿Qué es la paz interior?
Pero primero, ¿Qué es exactamente la paz interior? Una cosa que debes tener en cuenta es que no existe un estado que dure toda la vida. Somos humanos, y como tales, tenemos sentimientos de felicidad, de amor, de comprensión, de paz, pero también de ira, furia, tristeza, ansiedad, etc.
La paz interior es una forma de alcanzar un estado de tranquilidad y una forma de ver y percibir al mundo que nos rodea. El concepto de paz interior a menudo se asocia con el budismo, pero no siempre es una elección religiosa o espiritual, también puede verse desde varias escuelas filosóficas, como el estoicismo.
Sin embargo, para comprender qué es la paz interior, debemos comprender que no es la paz interior. La paz interior no lo es:
Ser pasivo y dejar pasar la vida, estar tranquilo y nunca divertirse, rechazar oportunidades, no tener más energía porque lo tienes todo dentro, convertirse en una persona tranquila, reservada e incluso tímida
Beneficios de tener paz interior
Existen cientos de beneficios para la salud tanto física como mental de alcanzar la paz interior. A continuación veremos algunos de estos…
Disminuye el estrés y la ansiedad
Tal vez no sea ninguna noticia inesperada, pero es bastante obvio que alcanzar la paz interior disminuye significativamente los niveles de estrés y de ansiedad. Es una excelente forma de evitar ataques de ansiedad o ataques de pánico de forma natural y sin la necesidad de tomar medicamentos.
En un estudio publicado en PubMed, se descubrió que los niveles de estrés y ansiedad en personas que practicaban meditación mindfulness, bajaron significativamente. Esto se debe a que cuando meditamos logramos la paz interior.
Se cambian hábitos y prácticas negativas
Para alcanzar la paz interior, es necesario adquirir buenos hábitos y desechar los malos. Uno no alcanza la paz interior simplemente pensando en ella, sino que también debe poner su granito de arena.
Sin embargo, como podrás imaginarte, embarcarte en la búsqueda de la paz interior incluye cambios saludables en tu dieta, adoptar hábitos sanos como la meditación y la gratitud. Todo esto tendrá un impacto positivo en tu vida y te pondrá de mejor humor, te ayudará a dormir mejor, y mejorará tus relaciones interpersonales.
Aumenta el enfoque en lograr metas y objetivos
No hay mejor manera de alcanzar tus objetivos que siendo realista y perseguir tus sueños con tranquilidad y objetividad. Si practicas este estilo de vida, verás que tendrás otra forma de acercarte a tus objetivos, de manera más pacífica, tranquila y segura.
Canaliza la energía hacia lo positivo
Cuando uno se enfoca en lo bueno y lo positivo, los pensamientos comienzan a cambiar sin esfuerzos. Tal vez al principio sea necesario hacerlo de manera consciente, pero verás como con el tiempo eso irá cambiando y será cada vez más inconsciente y lo positivo se vuelve automáticamente parte de tu vida.
Mejora las relaciones interpersonales
El pensamiento positivo puede mejorar dramáticamente tus relaciones. No solo las relaciones íntimas, sino también las relaciones personales, como la que compartes con tu familia, amigos, compañeros de trabajo y hasta desconocidos.
Puedes cambiar cómo te sientes, cómo actúas, y tus emociones y pensamientos positivos pueden afectar a todos los que te rodean, especialmente a las personas más cercanas a ti.
La razón es simple, piénsalo así…si tienes pensamientos negativos, esos afectarán tu estado de ánimo y cómo te sientes contigo mismo, lo que afectará tu relación o interacción con otras personas.
Si tienes pensamientos positivos, te sentirás más feliz y contento, lo que hará que los que te rodean se sientan cómodos y felices cuando estén contigo.
Fomenta el autocuidado
Cuidar tu paz mental es cuidarte a tí mismo. Cuando una persona cuida su salud mental, también cuida su cuerpo (su templo), y sus pensamientos y sentimientos. Y así esto también impacta otras partes de nuestra vida, es como una especie de bola de nieve de cambios positivos.
Recomendaciones para lograr la paz interior
A continuación te contamos cuáles son las mejores formas de alcanzar la paz interior. Son simples cambios, que a lo largo, pueden hacer una gran diferencia en tu calidad de vida y la forma en la que percibes el mundo y te relacionas con los demás.
1. Aceptar las situaciones que no se pueden cambiar
A veces la mejor forma de calmar la ansiedad y los nervios, los pensamientos negativos y la tristeza es aceptando situaciones que no podemos cambiar. ¿Por qué preocuparse por lo que no podemos controlar?, Esto puede arruinar nuestro estado de ánimo.
Si quieres poner esto en práctica, empieza por preguntarte: ¿Es esto algo que puedo controlar?.
Si la respuesta es sí, entonces no tiene sentido preocuparse, y si la respuesta es no, tampoco tiene sentido preocuparse, ¿Verdad?.
Es importante saber qué cosas están bajo tu control. Cualquier cosa más allá de eso puede distraerte y poner estrés en tu vida.
2. Desprenderse de cargas innecesarias
Debes ser abierto y directo con tus necesidades y deseos. Aprende a identificar cuáles son tus cargas y aquellas cosas que te estresan o te hacen daño y déjalas ir. Si no puedes solucionar un problema, simplemente acéptalo y déjalo ir. De nada sirve preocuparse o amargarse por un tema que no tiene solución.
No solo es más probable que, al final, obtengas lo que deseas, sino que también te sentirás más en control de tu vida y eso te dará seguridad y tranquilidad.
No dejes que otros se interpongan en tu camino, hazte cargo de tu vida. Tú tienes el control.
3. Simplificar y disfrutar de la vida
Solo tómate unos minutos para ordenar tu espacio de trabajo. Según la especialista en minimalismo como filosofía de vida, Marie Kondo, un espacio ordenado, simplificado y limpio aporta claridad y orden a la mente.
Ordena, simplifica y organiza tu hogar y tu vida también se verá afectada positivamente al vivir en un entorno más relajante. Deshazte de aquello que ya no uses, que solo ocupa espacio y junta tierra, solo te hará limpiar más al final, además puede hacer feliz a otra persona, es hora de soltar lo viejo.
4. Aprender a escuchar nuestras inquietudes
Es importante aprender a escucharnos para entender qué nos pasa y por qué nos pasa, así podremos solucionar nuestros problemas con mayor eficacia.
Intenta vivir una vida acorde con tus valores. Es demasiado fácil permitir que la sociedad dicte nuestras elecciones. No tienes que dedicar tu vida a una carrera para impresionar a los demás. Toma tus propias decisiones y haz lo que amas.
5. Evitar las críticas negativas hacia los demás
En el momento en el que empiezas a juzgar a otros, te metes en una especie de celda. Al ego le encanta juzgar. Gran parte de nuestra cultura se basa en el juicio.
El no juzgar se puede aplicar a cualquier cosa: personas, situaciones, pensamientos, sentimientos o cosas. Te lleva más profundamente a la verdad.
6. Poner en práctica el agradecimiento
Según la prestigiosa revista Forbes, la práctica de gratitud tiene muchos beneficios que ya están comprobados por la ciencia. Entre estos, mejorar y comenzar nuevas relaciones, mejora la salud física y mental, mejora la empatía y reduce la agresión, mejora el sueño y la autoestima, y mejora la fortaleza mental.
Tómate un momento para agradecer por algo del momento presente: el café que estás bebiendo, la cómoda silla en la que estás sentado; el suéter que te mantiene caliente; el suave aroma que hay en tu habitación, etc. A medida que practiques esto todos los días notarás cambios en tu estado de ánimo.
7. Aprender a perdonar y pedir perdón
A menudo pensamos en el perdón como algo que hacemos en nombre de alguien que nos hizo daño. Pero el perdón no se trata de otros, sino que se trata de nosotros mismos.
No hay nada de malo en perdonar a alguien que nos lastimó para sentirnos mejor. Esta es una elección activa que tomamos cuando necesitamos alivio de la toxicidad de la ira y el dolor.
8. Practicar ejercicios de respiración
Respira lenta y profundamente, expandiendo tu vientre. Pausando unos segundos con el aire en tu barriga y exhala lentamente. Repite esto cuatro veces y… Felicidades, con esta simple práctica, creas o no, acabas de calmar tu sistema nervioso.
La respiración controlada reduce el estrés, aumenta el estado de alerta y estimula nuestro sistema inmunológico. Durante siglos, los yoguis han utilizado técnicas de respiración para promover la concentración y mejorar la calidad de vida.
Hay estudios que muestran la evidencia de los beneficios de la práctica de ejercicios de respiración. Los estudios han descubierto que la respiración controlada puede ayudar a reducir la ansiedad, el insomnio, el estrés postraumático, la depresión y el déficit de atención.
9. Practicar la meditación
La meditación puede evitar que tu mente haga que una situación parezca peor de lo que realmente es. Si estás estresado después de horas de trabajo, detente y medita unos momentos y observa la diferencia que le hace a tu mente.
Según un estudio publicado en PubMed, la meditación tiene el poder de no solo calmar los nervios y bajar los niveles de estrés para alcanzar la paz interior, pero también ofrece numerosos beneficios para la salud física. Algunos de estos beneficios incluyen:
- Reducir el dolor.
- Bajar la presión arterial.
- Mejorar el síndrome del intestino irritable.
- Luchar contra la colitis ulcerosa.
- Reducir la ansiedad, la depresión y el insomnio.
- Para dejar de fumar.
10. Realizar ejercicios físicos
¿Alguna vez has notado lo bien que te sientes cuando sales del gimnasio? Esto se debe a que cuando hacemos ejercicio nos sentimos bien nosotros mismos por lograr algo, además liberamos endorfinas que nos ponen de buen buen humor, mientras que nos deshacemos de toxinas.
Según un estudio publicado en Wiley Online Library, el ejercicio no solo es bueno para el cuerpo, sino también para el cerebro y para evitar, e incluso tratar, enfermedades mentales y problemas psicológicos, como traumas.
11. Descansar adecuadamente
Dormir bien es la clave para un estilo de vida saludable, feliz y lleno de paz. Además de ayudarte a encontrar la paz interior, puede mejorar tu estado de ánimo, tu salud y la calidad de tu vida.
La mayoría de las personas no se dan cuenta de los efectos que puede tener en el cuerpo la falta de sueño. El sueño sana al cuerpo y restaura las sustancias químicas del cerebro que hacen que funcionemos normalmente.
Cuando no descansas pierdes tu capacidad para combatir las enfermedades, lo que aumenta el riesgo de contraer todo tipo de enfermedades, según la Clínica Mayo.
12. Concentrarse en el momento presente
Una mente en paz está en el presente. No trata de pensar compulsivamente en el pasado y el futuro. Puede devolver su atención al momento presente en armonía. La verdadera paz surge en el ahora.
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