Las operaciones o cirugías estéticas, son una herramienta para mejorar o incrementar nuestra seguridad, cuidando siempre de no exceder los límites.
La apreciación que tenemos de nosotros o las modificaciones que queramos hacer, siempre es importante que vengan desde nuestra propia necesidad y validación, no de la de otros.
Estas intervenciones suelen ir avanzando con el tiempo y destacando a través de tendencia en sus aplicaciones.
Justamente de esas vendremos hablando en este artículo, donde a continuación, explicaremos qué son las operaciones estéticas y las consideraciones que debemos tener si queremos una.
¿Qué son las operaciones estéticas?
En un artículo reconocido, se define la cirugía estética como aquella que cubre la necesidad de mejorar o rejuvenecer el aspecto físico de una persona. (1)
Se caracterizan e identifican dependiendo del procedimiento, zona y objetivo. Son intervenciones que no se consideran requerimiento para sanar alguna patología, sino acercamiento a un ideal estético, mejorando la valoración subjetiva de la imagen corporal, la calidad de vida y las relaciones personales, incluso las de pareja.
¿Cuáles son las operaciones estéticas con más demanda?
Las siguientes operaciones descritas a continuación, son aquellas con mayor demanda en la actualidad. Las mismas no están en un orden en específico, pero nos permitirá un mayor conocimiento del tipo de tratamientos estéticos que se adaptan a los estándares actuales:
1. Aumento de senos
El aumento de senos, es una de las intervenciones quirúrgicas estéticas más realizadas a nivel mundial. Consiste en la introducción de implantes entre la cavidad de las glándulas mamarias y el músculo del pecho.
Una de las motivaciones principales para este tipo de operaciones, es el sinónimo de feminidad que suele asociarse con el tamaño de los senos. Los implantes son de distintos materiales, tamaños y formas, lo cual permite la implementación de naturalidad y a través del tiempo se han desarrollado intervenciones que dejen la menor posibilidad de cicatriz en la zona.
Nota: En un artículo científico sobre cirugía de implante mamario, se expone que se debe tener un riguroso seguimiento postoperatorio, de igual manera se indica que los implantes suelen necesitar ser sustituidos a lo largo del tiempo de vida del paciente. (2)
2. Lipoescultura
Lipoescultura o liposucción, es un procedimiento de modelamiento estructural empleada para la eliminación de depósitos de grasa que están distribuidos en distintas áreas de nuestro cuerpo.
Es también una de las intervenciones más aplicadas y por la misma razón, se han ido evaluando y desarrollado diferentes técnicas y métodos. La aplicación de estos métodos, se enfatiza en referencia de pacientes para la incapacidad de disminuir de peso corporal con dietas, actividad física y tratamientos médicos. (3)
3. Rinoplastia
La rinoplastia es una de las operaciones estéticas que suelen venir acompañadas de motivos médicos, ya que las desviaciones suelen ser notoriamente visibles y estéticamente poco favorables.
De hecho, es lo más común: una intervención para la reconstrucción funcional y beneficio estético al mismo tiempo. En muchos casos, suele ser genético y condicionado, por lo que las condiciones vienen dadas para sus aplicaciones.
Para destacar: En un artículo sobre rinoplastia, exponen el beneficio del manejo y la importancia de la misma, además de ser la quinta cirugía estética más practicada por su abordaje y demanda. (4)
4. Aumento de glúteos
La colocación de implantes en los glúteos, se ve influenciado también por la corriente de atractivo femenino que se concentra en esa área y su implicación con la feminidad, debido a que a través del tiempo se ha visto la inclinación por esta área y la de los senos.
Se aplica para contornear y levantar los glúteos, además del incremento de su volumen, aunque es importante mencionar que existen otro tipo de tratamientos distintos a la aplicación de implantes que cubren las mismas necesidades.
5. Lipectomía
La lipectomía es también conocida como abdominoplastia, es una intervención que ayuda a reducir la flacidez de las paredes abdominales, sobre todo por la presencia de tejido excesivo desagradable que suele afectar la seguridad y calidad de vida del paciente.
La abdominoplastia se realiza bajo anestesia general o regional. Existen varias metodologías y en algunos casos es el complemento de una liposucción. (5)
6. Rejuvenecimiento facial
Es un tipo de tratamiento que se aplica con el fin de corregir, disminuir o eliminar marcas o evidencias manifestadas en la piel del rostro a través del paso de los años.
La piel cambia presentando flacidez, arrugas y lesiones que a través de intervenciones estéticas pueden verse reducidas con distintas técnicas. Suele ser más utilizada por mujeres.
Debes saber: El rejuvenecimiento facial en muchos casos resulta en intervenciones menores, como el relleno, luz pulsada, radiofrecuencia y láser. El rejuvenecimiento facial en sí puede ser reconocido también como lifting y el objetivo es un proceso de corrección de los cambios fisonómicos producidos por el envejecimiento. (6)
7. Otoplastia
La otoplastia consiste en la modificación de la forma o posición de las orejas, incluso el tamaño. Una deformidad congénita o inconformidad visual y física por parte del paciente, son los motivos más recurrentes de esta intervención.
Para el Instituto Maxilofacial, la intervención es mínimamente invasiva y se puede realizar a partir de los seis o siete años de edad, ya que es el momento en que las orejas se encuentran completamente desarrolladas. (7)
8. Botox y ácido hialurónico
El botox ha sido aplicado a través de los años para reducir las arrugas en la piel, ya que paraliza la musculatura. Es una proteína producida por el Clostridium Botulinum y tiene efectos temporales de entre cuatro y seis meses.
Nota: Se recomienda su aplicación, sobre todo en la formación de arrugas con la contracción o movilización de un músculo en específico, como por ejemplo, el entrecejo.
Por otra parte, el ácido hialurónico es en cambio una sustancia que rellena, incluso se utiliza para aumentar el tamaño de los labios. También es un procedimiento temporal pero su duración es de aproximadamente 18 meses. Y gracias a su naturaleza es absorbido por los tejidos y tiene la capacidad de transformarse en colágeno.
9. Marcación de abdomen
También conocido como una lipomarcación, es un procedimiento que forma parte de la lipoescultura ya que se encarga de la definición de los músculos del abdomen, a través de una intervención quirúrgica donde se aprovecha el mínimo exceso de grasa en el abdomen.
Tiene como objetivo, la marcación de abdominales y oblicuos y se puede perder la sensibilidad en la zona pero al pasar del tiempo se recupera.
10. Bichectomía
La bichectomía es una cirugía plástica menor, que consiste en la extracción de las bolas de bichat, los cuales son cúmulos de grasa que se depositan en las mejillas y que al retirar proporcionan un efecto de alargamiento en el rostro y un aspecto “más estético”.
Para destacar: Es una operación de fácil recuperación y con cuidados mínimos, sin cicatrices visibles y con resultados definitivos.
11. Braquioplastia
La braquioplastia es, en términos generales, un estiramiento de los brazos, donde se retira piel y grasas excedentes en las axilas y codos para aumentar la estética del paciente. Comúnmente son deformidades que se producen con el paso de los años, por lo que es inherente al proceso de envejecimiento. (8)
Es un tipo de cirugía segura y recurrente para la complementación de levantamientos mamarios o liposucción.
12. Rejuvenecimiento vaginal
El rejuvenecimiento vaginal, también conocido como vaginoplastia, es la intervención donde el cirujano elimina el exceso de piel y reduce el tamaño de la abertura, además de tensar la piel alrededor.
Es una operación ambulatoria, por lo que no requiere de hospitalización y los riesgos son pérdida de sensibilidad temporal, sangrado y dolor al tener relaciones sexuales después de la intervención.
Consideraciones sobre las operaciones estéticas
Para la decisión de realizar una intervención quirúrgica de medicina estética, se requiere la realización de ciertas consideraciones previas, las mismas serán mencionadas y descritas a continuación para su conocimiento y entendimiento.
1. Se efectúan bajo previa valoración médica
La valoración médica es indispensable para la toma de decisiones, ya que la mayoría de las intervenciones son permanentes y por lo tanto se debe estar seguro. La visión médica, ayudará a definir el posible resultado y las consideraciones a tener en cuenta respecto al estado de salud y de receptividad del organismo ante la operación.
2. Deben efectuarse por especialistas certificados
Los especialistas certificados, son capaces de realizar estos procedimientos con el debido cuidado y siguiendo el protocolo y procedimiento correcto para el éxito de la misma. No podemos dejar nuestra salud en manos de cualquiera, es muy importante analizar bien a merced de quien estaremos.
3. Los controles pre y postoperatorios son fundamentales
Los controles y cuidados son clave para el éxito de la intervención. La valoración preoperatoria además contabiliza los posibles riesgos, tiene relevancia indispensable en los resultados finales.
Los cuidados posteriores además, tendrán el propósito de mantener seguro al paciente y bajo condiciones indiscutibles para su correcta recuperación.
4. Los resultados dependen de los cuidados seguidos por el paciente y el médico tratante
La intervención de un profesional y la responsabilidad adquirida por el paciente para respetar el protocolo, serán los dependientes de la factibilidad y éxito de la intervención.
Los cuidados previamente mencionados, serán dictados por un médico tratante competente, aplicados y respetados por un paciente que sigue al pie de la letra para no comprometer su salud ni los resultados.
5. Las operaciones estéticas no están indicadas para todo el mundo
Es por ello que existe la previa valoración por un profesional, donde se debe considerar los tipos de piel, flexibilidad, manchas, producción de cicatrices o queloides, y factores inclusos de la salud y estabilidad de nuestro organismo que deben tomarse en cuenta para la decisión de una intervención quirúrgica que no sea indispensable o necesaria.
