12 efectivos alimentos para subir las plaquetas de forma natural

Tabla de contenido

Presentar un bajo número de plaquetas generalmente es una señal de alguna condición subyacente. No obstante, existen muchos alimentos que pueden contrarrestar esto.

Nota: Sin embargo, no es necesariamente un indicador de algún trastorno grave. En muchos casos, es solamente un indicio de un déficit nutricional de vitaminas o minerales del cual tal vez no estés consciente.

Si deseas mejorar tu alimentación y reponer tu cuerpo con los nutrientes que necesita, te ofrecemos una lista de alimentos cuyos beneficios te ayudarÔn a elevar el número de plaquetas.

¿Qué son las plaquetas y cuÔl es su función?

El trombocito o plaqueta es el tipo de cƩlula que predomina en nuestro torrente sanguƭneo.

Nota: Los trombocitos nacen de los megacariocitos; cƩlulas de gran tamaƱo que, al romperse, forman cientos de trombocitos de menor tamaƱo que circulan libremente por nuestros vasos sanguƭneos.

Una vez formado, el trombocito tiene una vida promedio de 7-10 dĆ­as.

La función de los trombocitos es la coagulación; el proceso de reparación de las paredes de los vasos sanguíneos tras una lesión, deteniendo las hemorragias.

Nota: Diariamente, las paredes de las arterias se encuentran bajo un estrƩs constante por el rƔpido paso de la sangre, pero los trombocitos se encargan de mantener la integridad de la pared intacta.

Dentro de la pared de un vaso sanguíneo se encuentran moléculas que se liberan cuando la pared sufre una fisura o lesión.

La superficie de las plaquetas las detecta y se adhieren al Ôrea lesionada (un proceso llamado agregación plaquetaria).

Las plaquetas adheridas se activan y reclutan una mayor cantidad de trombocitos, formando un entramado de éstas. A la unión de todas estas plaquetas, se le conoce como trombo.

Importante: El conteo normal de plaquetas para un hombre adulto sano es de 135.000-317-000 mil por microlitro de sangre. Para una mujer adulta sana, es de 157.000-371.000 mil.

Alimentos para subir las plaquetas

1. Espinacas

La espinaca se encuentra cargada de beneficios, tales como vitaminas, minerales y omega-3.

La vitamina K en la espinaca favorece la formación de nuevas plaquetas, ya que es utilizado como un metabolito durante la formación de estos. Una sola taza de espinaca (30 g) ofrece el 181% de las necesidades diarias de esta.

A lo largo de las dƩcadas, revistas biomƩdicas tales como Food Nutritional Research y Annual Review of Nutrition han demostrado que la vitamina K es un factor procoagulante y estimulante de las plaquetas (1).

La vitamina C también es un importante nutriente de carÔcter antiinflamatorio, involucrado en la cicatrización y detiene el sangrado, ya que estimula la elevación del conteo de plaquetas.

Para destacar: Una taza de espinaca (30 g) contiene 41.6 mg de omega-3, este último constituido por Ôcido alfa linoleico, favorable para la formación de plaquetas.

2. Naranjas

La naranja es abundante en vitamina C y contiene una cantidad modesta de Ôcido fólico.

Para destacar: La vitamina C es, ante todo, un antioxidante potente. Estudios han comprobado que altos niveles de estrés oxidativo (causado por radicales libres) afectan la función y producción de plaquetas.

Dietas ricas en antioxidantes favorecen la defensa celular contra los radicales libres, manteniendo un nivel plaquetario adecuado.

La vitamina C actúa mediante la formación de una molécula llamada adenosín difosfato (ADP). El ADP es usado por las plaquetas y otras células sanguíneas para lograr madurar y completar sus funciones.

El Ôcido fólico también favorece la división y maduración celular a nivel de la médula ósea para la producción de megacariocitos.

Los beneficios de la naranja pueden ser adquiridos ya sea mediante el consumo de la fruta entera o extractos naturales del zumo de la naranja.

3. Remolacha

La remolacha o también conocida como betabel, es rica en vitamina C, Ôcido fólico, potasio, hierro y manganeso. Todos coadyuvantes en mantener los niveles plaquetarios en sangre en cifras normales.

Entre las distintas causas que llevan a una trombocitopenia, la deficiencia de hierro se encuentra entre ellas.

Para destacar: Estudios llevados a cabo por investigadores del Ôrea de hematología y oncología de la Universidad de Tennessee demostraron una asociación entre el déficit de hierro en pacientes anémicos y trombocitopenia. Luego de la administración de alimentos con hierro durante dos semanas, sus plaquetas se elevaron (2).

La médula ósea utiliza el hierro tanto para la producción de glóbulos rojos y megacariocitos. A medida que los niveles de hierro disminuyen, ocurre una competencia entre ambos tipos de células para obtener el poco hierro circulante.

Los glóbulos rojos poseen mayor afinidad hacia el hierro que el megacariocito. Este último, desprovisto de hierro, no puede madurar en su totalidad y producir nuevas plaquetas.

4. Zanahoria

La zanahoria provee al organismo con beta carotenos, que aumentan la función plaquetaria.

Contiene vitamina A. Este metabolito favorece el crecimiento y la replicación de células. En estados de déficit plaquetario, la vulnerabilidad y los sangrados son mÔs proclives a ocurrir.

Nota: Mantener las defensas altas tambiƩn es imperante para mantener tus plaquetas en niveles normales y la vitamina A es importante aliado para ello.

La zanahoria también actúa como un antiinflamatorio y potenciador de las células inmunitarias, que lo utilizan para generar la energía necesaria y así eliminar los microorganismos infecciosos.

Las infecciones pueden generar una trombocitopenia. La sepsis es el estado mÔs grave de una infección que puede comprometer todo tu cuerpo, también es capaz de disminuir los niveles plaquetarios.

La disminución de estos niveles aumenta el riesgo a hemorragias, que empeoran las condiciones de las personas ya comprometidas. Estudios por parte del Journal of Nutrition demostraron una muy sugestiva asociación entre el déficit vitamínico y la proclividad a infecciones de las vías respiratorias (3).

Para evitar ello, consumir vitamina A, coadyuvante de la función inmunitario y plaquetario es altamente beneficioso.

5. Pimientos rojos

Otro alimento cargado de vitamina C es el pimiento rojo. 100 g de pimiento rojo contiene el 97% de las necesidades diarias de susodicha vitamina.

La vitamina C es transportada y depositada en el interior de las plaquetas, aumentando la rigidez de estos y su tiempo de vida. La producción de plaquetas disfuncionales puede ser una causa de trombocitopenia.

La vitamina C, ademÔs de ser un antiinflamatorio y antioxidante muy bien conocido, cumple con otras funciones: participa en el proceso de coagulación como un metabolito de suma importancia.

Nota: Entre otros beneficios del pimiento rojo tenemos: vitamina A, vitamina B6 y vitamina E. En menor proporción, contiene vitamina K, hierro, zinc y magnesio.

6. Coco

El consumo del coco ejerce un efecto sobre el nivel de plaquetas debido al contenido de su valor nutricional. Entre estos, se encuentra, en modesta proporción, la vitamina C. En proporciones aún menores, la vitamina E.

Para destacar: Estudios publicados por el International Antioxidant Research Centre en London y el World Journal of Critical Care Medicine en EE.UU, demuestran que el Ôcido ascórbico, componente de la vitamina C, juega un rol importante en las funciones plaquetarias (4).

Entre los beneficios del coco se encuentra que ofrece un cierto porcentaje de aminoÔcidos que son metabolizados por nuestro cuerpo y favorecen, indirectamente, la función plaquetaria. Entre estos, se encuentran la metionina y cisteína.

Nota: 100 g de pulpa de coco ofrece una cantidad modesta de minerales tales como el hierro y magnesio, que trabajan sinƩrgicamente para ser utilizados por nuestro cuerpo.

7. Frijoles

Los frijoles son alimentos cargados de hierro, un mineral indispensable en la producción de plaquetas.

Estudios, tales como aquel publicado por el departamento de oncologƭa y hematologƭa pediƔtrica de la Universidad de Chicago, reportan la coexistencia de un estado anƩmico y un bajo conteo plaquetario (5).

El hierro es usado por múltiples proteínas a nivel celular para ejecutar sus funciones. Durante el ciclo de formación de nuevas plaquetas, la trombopoyetina es el principal factor de crecimiento involucrado.

La trombopoyetina requiere del hierro para ejecutar sus funciones. Sin este, cada uno de los pasos en la maduración de megacariocitos se ve interrumpida y el producto final (las plaquetas) se ve reducido.

Para destacar: El déficit nutricional de hierro lleva a un tipo de anemia. Esto, a su vez, induce indirectamente una disminución de plaquetas. Por ende, el consumo de frijoles se recomienda para elevar los niveles de hierro disponibles para nuestro cuerpo.

Entre los distintos tipos de frijoles que ofrecen la mayor cantidad de hierro destaca la lenteja. Cada taza de lentejas, cocinadas, nos ofrece 6.6 mg de hierro. AdemÔs, ofrecen Ôcido fólico, carbohidratos, fibra y demÔs.

Justo detrÔs de ellos, se sitúan los frijoles blancos, rojos y negros que contienen entre 4.4-6.6 mg de hierro.

8. Nueces

Las nueces o cacahuates, son ricas en Ôcidos grasos poliinsaturados (omega-3 y omega-6) que contienen un alto número de alfa Ôcido linoleico y Ôcido araquidónico.

Estos Ôcidos grasos juegan un rol en la formación y regulación de nuevas plaquetas. La superficie de los trombocitos estÔ formada por distintos tipos de Ôcidos grasos, entre estos los poliinsaturados.

Nota: Los trombocitos activados durante una hemorragia estimulan la liberación enzimÔtica de Ôcidos grasos poliinsaturados que, por razones aún parcialmente desconocidas, favorecen la agregación de plaquetas a la herida.

Estudios publicados por el departamento de farmacologƭa y medicina interna de la Universidad de Michigan demuestran que los Ɣcidos grasos omega-3 y omega-6 ejercen un efecto directo sobre el nivel plaquetario (6).

Un control sobre el conteo de plaquetas circulantes se asocia con una reducción de enfermedades inflamatorias o cardiovasculares.

9. Huevos

El huevo es un alimento cargado de mĆŗltiples nutrientes.

El huevo contiene Ôcidos grasos, aminoÔcidos esenciales, proteínas, vitamina D y, especialmente, vitamina B12. Los Ôcidos grasos son utilizados para el ensamblaje de la membrana del megacariocito, durante su formación.

Los aminoÔcidos y proteínas actúan como herramientas para ejecutar sus funciones bÔsicas.

La vitamina D favorece la absorción del hierro a nivel intestinal, consumido en la dieta. Esta última también atrapa al hierro y favorece su transporte en el torrente sanguíneo a los tejidos donde sea necesitado.

10. Salmón

El salmón es un pescado conocido por sus altas cantidades de omega-3.

Ciertos tipos de Ɣcidos grasos, tales como los poliinsaturados, no pueden ser producidos por nuestro cuerpo. Deben ser adquiridos en su totalidad de nuestra dieta.

Para destacar: El omega-3 es un potente fitonutriente antiinflamatorio que eleva tus defensas contra microorganismos. Durante las infecciones, la enzima ciclooxigenasa convierte el omega-3 en otras molƩculas inflamatorias y protectoras.

¿Por qué es esto importante en relación con las plaquetas? Cualquier microorganismo puede interferir con la capacidad de la médula ósea para producir células sanguíneas, aumentando los estados de debilidad.

Proveer a nuestro cuerpo con omega-3 y omega-6 se convierte entonces en una necesidad en aquellas personas con bajo nivel plaquetario, susceptibles a infecciones.

11. Carne de ternera

Distintos tipos de carne ofrecen vitamina B12, tambiƩn conocida como cobalamina, para tu organismo. Entre estas, destaca la carne de ternera.

La cobalamina actúa como un importante intermediario que favorece el crecimiento y división de células inmaduras hasta finalmente convertirse en distintos tipos de células, como lo son los glóbulos rojos, leucocitos y plaquetas.

Es natural, por ende, quelos déficits significativos de la cobalamina produzcan alteraciones como lo son: anemia perniciosa, disminución de glóbulos blancos y disminución del nivel de plaquetas.

Nota: La vitamina B12 no es producida naturalmente por nuestro cuerpo, sino que debe ser adquirida mediante la dieta, particularmente productos de origen animal.

Satisfacer las necesidades diarias de vitamina B12 es sencillo ya que, luego de los 14 aƱos, solo se necesitan 2.14 miligramos al dƭa.

12. Pollo

El pollo es otro alimento de origen animal que contiene vitamina B12.

Cuenta ademÔs, con un cierto porcentaje de grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas que favorecen la formación de nuevas plaquetas y la agregación plaquetaria también, disminuyendo el riesgo de sangrados.

Una revisión por equipos de investigación en Italia, publicada en la revista Food & Nutrition Research, demostró que el consumo de pollo en cantidades moderadas aumenta la función plaquetaria (7).

Nota: La disminución o aumento significativo de los niveles de lípidos ejerce un efecto directo sobre la función plaquetaria. Mantenerlos bajo control es clave si deseas mantener tus plaquetas elevadas.

El pollo es una excelente fuente, al igual que la carne de ternera, de la familia de la vitamina B. B6, Ɣcido pantotƩnico (B5) y B12.

La vitamina B6 (o piridoxina) favorece la síntesis de células sanguíneas, favoreciendo el transporte y utilización de hierro. También estimula la producción de esfingolípidos, constituyentes de la membrana celular durante su crecimiento.

El pollo también nos ofrece cantidades moderadas de hierro, cobre, zinc y selenio. Durante su cocción, libera moléculas que una vez consumidas estimulan la capacidad de nuestro cuerpo de absorber nutrientes.

Esto beneficia la capacidad intestinal de absorción de un gran porcentaje de las proteínas, minerales y vitaminas que ofrece el pollo y también de otros alimentos.

Conclusiones claves

  • Presentar un bajo nĆŗmero de plaquetas generalmente es una seƱal de alguna condición subyacente. Sin embargo, no es necesariamente un indicador de algĆŗn trastorno grave. En muchos casos, es solamente un indicio de un dĆ©ficit nutricional de vitaminas o minerales del cual tal vez no estĆ©s consciente.
  • Las plaquetas o trombocitos son cĆ©lulas que predominan en nuestro torrente sanguĆ­neo. Su función es la coagulación; el proceso de reparación de las paredes de los vasos sanguĆ­neos tras una lesión, deteniendo las hemorragias.
  • Es importante que sepas que el conteo normal de plaquetas para un hombre adulto sano es de 135.000-317-000 mil por microlitro de sangre. Para una mujer adulta sana, es de 157.000-371.000 mil.
  • Existen una variedad de alimentos que pueden ayudarte de forma natural a subir los niveles de tus plaquetas entre ellos estĆ”n frutas como la naranja, el coco, verduras como la zanahoria, remolacha, espinacas y proteĆ­nas como el huevo, salmón, pollo y carne de ternera.

Enmanuel Da Silva

Enmanuel Da Silva

Estudiante de 3er aƱo de Medicina. Escritor desde hace 2 aƱos. Interesado en neuroanatomƭa, neurologƭa, neuropsicologƭa, psicologƭa y psicologƭa del aprendizaje.